La escalada de sucesos que hacen que este nuestro país sea una república bananera y de coña no ve el freno, como nuestra prima de riesgo (alentada por las declaraciones de la rana Gustavo Montoro diciendo que no hay dinero para pagar las nóminas). Nos quieren hacer creer que suben el IVA o recortan (otra vez) el sueldo a los funcionarios porque no hay otro remedio (además de excusar responsabilidades, obviando que buena parte de la situación de deuda no es solo culpa del PSOE, porque las comunidades más endeudadas de España son del PP), pero los únicos que pagamos los desmanes de los demás somos los pobres parias: funcionarios, trabajadores, parados... La gente que no tiene un coche oficial, ni toma vuelos en business, ni cobra dietas por vivir en su propia ciudad, ni recibe ipads por pegarse siestas en el pleno, ni tienen que estar toda su puta vida trabajando para cotizar ni recibir una jubilación a todo lujo... (¿Quiénes son los privilegiados, perdonen?). Precisamente los que no hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, ni tenemos SICAVS, ni tributamos al mínimo por ser gran empresa, ni defraudamos a Hacienda, ni tenemos cuentas en paraísos fiscales. Tampoco los que hemos hundido a la banca obligando a que nos tengan que rescatar con cien mil millones de euros. Las personas a quienes la macroeconomía nos toca los cojones, o los ovarios, y lo que vemos es un empobrecimiento generalizado y alarmante de la sociedad, con sueldos más reducidos, trabajos más precarios, condiciones laborales retrógradas y, en cambio, subidas (ahí sí que conviene ponerse al mismo nivel que Europa, claro) en la luz, en el metro, en todo.
Nos quieren hacer creer que no hay más alternativa, pero solo hay que mirar a nuestro país vecino. No le han hecho falta seis meses, sino solo 56 días poner en marcha otro tipo de medidas (medidas socialistas que deberían abochornar sobre todo al PSOE). Hay que poner freno a esta situación, y de forma urgente. Ya hemos permanecido lo suficientemente pasivos y si hasta ahora hemos supuesto una molestia para Cifuentes, a partir de ahora tenemos que ser una pesadilla. Que sean ellos, esa casta que no pasa oposiciones (por lo que nos odian) y cuyos méritos consisten en ser los palmeros de grandes empresarios y de la iglesia, los que se tengan que joder (muy fuerte que se pueda insultar impunemente y que no haya una expulsión de inmediata de la enchufada de Andrea Fabra) porque pierdan sus privilegios al perder su escaño y todo el chiringuito que tienen montado. Puede que los problemas no se solucionen tras una pancarta, pero al ritmo que vamos desde luego trabajando no va a poder ser, porque no se va a poder trabajar.
Y todo empieza con la manifestación de mañana, del 19J, también de consumo, que eso hace mucha pupa. Ahí tenemos que echarnos a la calle y demostrar que somos muchos y estamos enfadados. Y como a esta gente le importa más bien poco eso, tendremos que llevar a cabo medidas más contundentes, como huelgas generales (insisto en que el problema es tan generalizado que una huelga indefinida de nuestro sector no sería lo más correcto, porque no sólo es la Escuela Pública la que está agonizando, sino toda la sociedad de bienestar). Que empiecen a tenerlo claro. A nosotros nos han jodido suficiente, ahora toca que se jodan ellos.
2 comentarios:
Ya han traspasado todas las líneas posibles: basta de mentir, de abusar, robar y criminalizar al trabajador, de manipular y de tiranizar a un país. Vamos con todo y a por todas.
A ver quién se va a joder ahora.
está claro que se pueden hacer las cosas mucho mejo. No tenemos una muestra en el barrio madrleño de alcalá de enares o torrelodones donde es???
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