jueves, septiembre 07, 2006

2. Reclamaciones y despedidas

Se abre el telón. Se ve a unos diez profesores sentados en una mesa alargada leyendo un papel escrito por un alumno de 2º de bachillerato que argumenta (bueno, "argumentar" es una palabra que hasta podría resultar una broma) lo siguiente:

- Ya sé que el examen está suspenso, pero apelo a su buen corazón para que tenga en cuenta mi situación. Tengo 21 años y quiero irme a Sevilla a estudiar un módulo y sólo me hace falta aprobar esta para poder seguir con mi vida adelante.

Sólo faltaba que pusiera que tenía cuatro hijos a los que alimentar y que fuera canturreando esto con ritmito como los que piden en el metro. Vamos, es que estos chicos no entienden nada. ¿¿Y el jamón que te hace ser mejor persona?? Por supuesto, no tuvimos corazón. De hecho, si encontráis uno latiendo, devolvedlo, que seguro que es de alguno del departamento.

Otro de los que reclamaban aducía que tenía 20 años y que había ido a una academia durante el verano. Pedía que se considerase su esfuerzo. Amos... Sí, había pasado de sacar unos doses a un 3,5 (creo, la verdad es que yo no presté mucha atención a sus exámenes...), pero me parece que a las puertas de la universidad (o un módulo formativo de grado superior si no quiere pasar por selectividad como era el caso) la teoría del esfuerzo (para nada practicado durante el curso) se queda un poco insuficiente.

Prometo que las decisiones de revisar exámenes y ver que no sólo no ha lugar a la queja, sino que quien lo ha corregido fue muy generoso y puntuó al alza, no tienen que ver con el hecho de no dejarnos libre la mañana y obligarnos a reunirnos en el departamento, con el puñetero calor que hacía ahí dentro.

Se cierra el telón... El curso 2005-06 pasó definitivamente a la historia. Ya no tengo que volver al instituto del norte salvo para firmar el libro de escolaridad como tutor. Y para devolver las llaves si es que las encuentro, que las he vuelto a perder [aparecieron esta mañana, en el bolsillo de unos pantalones]... Tocó el turno de las despedidas. Algunas, siguiendo el rol de la hipocresía, como mandan los cánones. Otras que de verdad te dan penita, compañeros que merecen la pena y que te gustaría contar con ellos. E incluso ha habido despedidas sin decir ni mu. Como al de las piedras en los riñones del final de curso para poder sacarse las oposiciones tranquilamente, por poner algún ejemplo. Ah, también despedida de tres alumnas de mi tutoría, que han venido a verme.

Este curso lo malo queda guardado en una carpetita muy reducida. En cambio lo bueno no entra ni en los cajones. Si el primer año fue gracias a los compañeros, este ha sido sobre todo por mi tutoría.

PD: sigo investigando en el nuevo blog cómo funcionan diversas herramientas. De momento no sé ni poner fotos ni enlaces, pero estoy mirando en las ayudas y eso. Paciencia

10 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusta el verde

JB dijo...

Hombre, sí que se habían esforzado... en prepararse el discurso, quiero decir.

Para las imágenes y enlaces tienes un botón en el editor de posts, al lado de los de "negrita", "cursiva", y todo eso.

Anónimo dijo...

¡Me alegro mucho de leerte!
Mucha suerte en tu nueva andadura. ¿Es tu tercer año?
Yo ayer me pasé DOS horas en la reunión del departamento, de inglés en mi caso... Todo por culpa del mal rollo entre las dos vacas sagradas del departamento.
En fin, ¡que mucha suerte de nuevo!

Leia

Anónimo dijo...

Pero que poca consideración teneis los profesores!!!!! con lo que se esfuerzan (nos esforzamos) los pobres alumnos, (sobre todo en verano) y no teneis en cuenta que de un dos pasamos a un tres, y ni un triste aprobado por el esfuerzo.

si es que no teneis corazon!!!!!!

Suerte en el nuevo insti.

Un beso

Anónimo dijo...

(¡Voy a tener que cambiar tu enlace!) ¿Y te das cuenta? Aquí no puedo poner mis múltiples versiones de nick, jejejeje.
Pero que sepas que tu nuevo blog me gusta muchoooo, y que el verde me alegra la vista, aunque me recuerde a la Gran H d P de Amena, jajajajajaja, noooo, para qué te he dicho esto, eres capaz de cambiarte de plantilla :p

Yo te digo una cosa... me vas a llamar tonta o lo que sea, pero a mí me escribe esa nota un alumno, que ni es tierna, ni es persuasiva ni es ná, y... yo creo que le he apruebo, ¿eh? Bueno, depende, si hay posibilidades de que en una inspección pueda llevarme una bronca no, pero si luego a mí esto no puede repercurtirme en nada, no me lo pienso dos veces. Pobre niño, se queda sin módulo, se queda sin Sevilla y se queda sin novia (no me digas que no has deducido entre líneas que está enamorado de una sevillana, o como diría él, "pillado". Si no, pa qué se va a ir un madrileño, que en Madrid lo tenéis todo, a Sevilla, eh??)

Lo tuyo con las llaves no es normal, pero con las llaves y con cualquier objeto material que esté en tus manos. Podemos verlo al revés, son ellos que te pierden. Tú no tienes la culpa. Me imagino a tus llaves "¡¡hemos perdido a Juliiiii!! ¿Ande andará?" Así que nada, déjate buscar.

Y ya por último... me alegro mucho de que tu balance final sea tan positivo, que la metáfora de la carpetita y el cajón lo dice todo ;-)

¡Un beso!

Anónimo dijo...

Muchas gracias por los comentarios que me habéis dejado en los dos posts. A la mayoría os puedo dejar comentarios en vuestros blogs y a los anónimos o sin blog registrado, aunque supongo que esto no lo miraréis, también quería agradecéroslo: amelche (que me pasé por tu blog, pero debes de tener activado algo por lo que no se puede comentar, o simplemente es que mi torpeza alcanza límites insostenibles), laura (que creo me vienes siguiendo desde hace tiempo y no te he dicho nada), merche (bueno, a ti también hace tiempo que no te veo pero a ti te puedo hacer llegar los agradecimientos en cualquier momento) y Leia (que ya contaré mi experiencia de hoy, y que creo que tienes un blog, o me confundo con alguien cuyo nombre empieza por 'l' o contiene la letra 'l').

Pues eso: a todos, gracias.

Anónimo dijo...

Ah, zu, que te dejo. Gracias por pensar en verde, jajaja.

Anónimo dijo...

Qué verdosico todo!! Me gusta!!

Vaya, ahora se escriben cartas para que te aprueben? Antes se hacía eso? Yo creo que directamente se enviaba un jamón ibérico o se hacía algún favorcillo al jefe/jefa de estudios... y piensan que con solo una carta te van a aprobar? jijiji!!Inocentes...

Así me gusta, sin piedad, que luego se acostumbran y te piden que les apruebes con un dos...

Un beso!

Luis dijo...

vaya tela con las apelaciones de esos chicos, y eso que son de bachillerato, pero qué generación viene por ahí, por dios, jajaja!! y eso que la mía ya estaba tocailla!!

Un saludo enorme

Anónimo dijo...

Cuando tuve la gran oportunidad de ir a mis prácticas de magisterio del primer año (ojo: ver mis pintas en 1º de carrera, pipiola total)el tutor me dejó sola con los "niños" mientras éstos hacían un examen. Un par de ellos se levantaron para coger una chuletilla, (no de cordero precisamente) y delante de mis narices. Me levanté e hice un gesto de pocos amigos e hice un amago de sacar la pistola jeje. Y atención a la respuesta: " Es que si no cateo, anda por fa dejame copiarme" .
¿ Y a mi que me cuentas chavalote? ¿Qué me estás contando? ¿Qué crees que yo estoy aquí pa echar el rato? tes ki ya!, pensé yo , claro. En fin...alumnos, si empiezan en primaria no me extraña los que ya van por bachillerato...
Yo no sé que harán ahora, yo sé de una que cada vez que veía el examen de historia se ponía malísima y tenía que irse a su casa.
Saludos