sábado, diciembre 31, 2011

232. ¿A quién nos queremos parecer? (III: ¡Finlandia!)

Para terminar con el análisis de los modelos educativos más exitosos (ver ¿A quien nos queremos parecer, I y ¿A quién nos queremos parecer, II), llegamos a Finlandia, donde Reijo Aholainen, director del Ministerio de Educación y Cultura (no Educación y Empleo, ni tampoco de Instrucción) señala 5 puntos clave del éxito de su país, pero antes aporta algunos datos:
  • En los años 90, Finlandia, país agrícola, sufría una dura recesión y mucho paro.
  • Se traspasaron fondos de Defensa a los colegios tras el colapso de la URSS.
  • Finlandia invierte 200.000€ en educar desde Primaria hasta la Universidad.
Y aquí van las cinco claves:
  1. Los profesores son gente VIP (y no Vilipendiados, Injuriados, Puteados, como aquí equivaldrían esas siglas): la docencia es una profesión prestigiosa y bien remunerada. Sólo son profes los mejores y el entrenamiento no cesa durante toda su carrera.
  2. Gratis total (vade retro Satanás, piensan Esperanza y la Figar): nunca falta financiación. Pero ojo al dato: CASI TODAS LAS ESCUELAS SON PÚBLICAS Y MUNICIPALES. Transporte escolar, libros y comida, igualmente gratuitos. Aulas bien equipadas, un ordenador por cada dos alumnos.
  3. ¿Y los niños que tienen problemas?: clases de apoyo para ellos en el mismo cole, aparte de que se les asigna un tutor. Por ejemplo, si alguien no conoce el finés, en la clase se mete un traductor con el alumno y después los contenidos (ya fuera del aula) se le repiten en su idioma y en finés (igualito que aquí: el que tiene problemas, que se joda, que ya se han malgastado suficientes fondos con la LOGSE).
  4. Leer, leer y leer. Se trabaja mucho la lengua y la enseñanza de otras lenguas es vital (y seguro que no impartiendo naturales y sociales en inglés, como pasa con nuestro gilingüismo).
  5. Los padres cooperan. Clases cortas y prácticas. Prevalece discutir a memorizar. Artes, cocina, deportes... Honradez y trabajo como premisas. Por algo es una sociedad de las menos corruptas (esta es otra clave: nuestra corrupción la amparamos entre todos porque en el fondo aplaudimos al que malversa porque nosotros querríamos hacer lo mismo, y por eso los fraudes se dan en todos los ámbitos, desde Iñaki hasta la Pantoja, ejemplo de cómo una imputada no sólo cumple la condena que debería, sino que encima nos "canta" las campanadas porque tiene relevancia social y no queda marginada, pasando por el que no declara sus impuestos o el que choricea unas vueltas si el camarero se confunde).
¿Tan difícil sería importar un sistema parecido al de Finlandia? ¿No está demostrado que funciona? ¿A quién se quiere engañar cuando nos vienen con recortes, con medidas que lo único que consiguen es desmotivar al profesorado? ¿No es clave educar en valores? Está clarísimo que no interesa este modelo.

Para acabar, me he encontrado por casualidad, buscando datos para documentar esta entrada, el siguiente informe de la Comunidad de Madrid reflexionando sobre el sector público. A mí me resulta, cuanto menos, sangrante, que se jacten de reducir el peso del sector público...

jueves, diciembre 29, 2011

231. ¿A quién nos queremos parecer? (II: Suecia, Heckman)

Siguiendo con la comparativa de los modelos educativos con mejores resultados (ver ¿A quién nos queremos parecer, I), le llega el turno a Suecia, donde Odd Eiken, ex secretario de Estado de educación, nos comenta su funcionamiento. Su modelo, a mi modo de entender, es más peligroso de cara a nuestro país, y ahora explicaré por qué.

Abolieron su LOGSE porque igualaba a la baja y plantearon una reforma que premió la excelencia. Para ello, optaron por facilitar el derecho a elegir colegio: los más requeridos son los más subvencionados (y a la inversa) para fomentar la mejora de la calidad educativa. Pero ojo, Espe, Luci y Ali, nada de que el derecho a elegir el mejor cole esté reservado a quienes se lo pueden pagar. Y es que han implantado un sistema de bonos:

El Estado da un cheque entre 6000 y 7500 € anuales, independientemente de la renta de cada familia. El cheque cubre al menos el 85% del coste de la escuela y se puede elegir pública o privada. Dos peligros le veo: no tenemos cultura de cheques y sí de malversar (el dinero acabaría en todas partes menos en los coles). Y aquí se fomentaría la privada, no se juega en igualdad de condiciones y ya conocemos esa retórica falaz de la "libertad de elección de centro por parte de las familias": te cierro los coles públicos, te abro concertados, digo que el alumnado de la pública baja, me sale más rentable un concertado y que nadie discuta o se le abre un expediente.

Volviendo al sistema de bonos, llama la atención que vaya al margen del nivel de ingresos de las familias. Eiken responde: "teníamos mucho déficit público y hubo que inventar el estado de bienestar para salvarlo (...). La educación y la sanidad siguen siendo universales, pero si en un centro no te atienden bien, acabará cerrando por que la gente puede irse a otro donde lo hagan mejor".  Aquí directamente ni se plantean eso de salvar el estado de bienestar. Aquí lo que prima es el estado de privatizar.

Pasamos a las reflexiones de James Heckman, Premio Nobel de Economía estadounidense. Aquí copio varias de sus ideas:
  • Estimular al niño en Preescolar es clave del éxito y sale rentable: devuelve de entre un 7 y un 10% anual al Estado. "Es más rentable invertir aquí que en Bolsa".
  • No se trata de enseñar a leer cuanto antes, sino de estimular las habilidades sociales y la formación del carácter, mucho más importante que el cociente intelectual. Antes de los 4 años se consiguen grandes logros. 
  • Hay que evitar los ambientes desfavorecidos porque desarrollan menos habilidades.
  • Transmitir conocimientos no es tan importante como motivar, y eso no está reñido con la disciplina. 
  • La familia es clave en este proceso.
Este hombre habla de cosas muy extrañas: ¿la etapa Preescolar una gran inversión? ¿Sin tarimas se pueden conseguir buenos resultados? ¿Las familias implicadas? ¿La instrucción no es el principal caballo de batalla? ¿Hay que ayudar a educar en la escuela? Bah, ni puto caso, por más que sea un Premio Nobel. Nosotros a lo nuestro, a desmantelar la red de escuelas infantiles públicas y a seguir hurgando en la sima de las desigualdades, que el niño que nos importa es Borja Mari, amiguito del nieto de Josemari Aznar, y con cuantos menos tenga que competir, mejor que mejor.

martes, diciembre 27, 2011

230. ¿A quién nos queremos parecer? (I: Corea, Singapur)

El 4 de diciembre apareció un interesante reportaje en el XL Semanal sobre los modelos educativos que lideran las clasificaciones mundiales en educación, deteniéndose en países como Finlandia, Suecia, Singapur y Corea del Sur a través de personajes destacados en educación, además de incluir unas reflexiones de James Heckman, Premio Nobel de Economía.
XL Semanal, 4 de diciembre

Lo primero que llama la atención es cómo en estos países la educación tiene una importancia primordial, a diferencia de lo que ocurre en España, donde ni por asomo preocupa tanto (hablamos de preocupación en términos de importancia social, perspectivas de futuro, planteamientos a medio y largo plazo, no de preocupación por evitar que se propaguen las camisetas verdes como si fueran a provocar una especie de contagio).

Resulta interesante conocer otros sistemas educativos y compararlos con el nuestro. Para no extenderme demasiado, voy a dividir la entrada en tres partes: la primera, refiriendo los datos de Corea y Singapur; la segunda, los de Suecia y las reflexiones de Heckman, y la tercera, para dar con el "paraíso" educativo, Finlandia, cuyo nombre ya es algo así como algo reverencial.

De Singapur habla Saravanan Gopinathan, profesor del Instituto Nacional de Educación. Datos:
  • "Le dedicamos [a la educación] el 20% del presupuesto. Lo consideramos una inversión, no un gasto (¿de qué me suena este latiguillo?). En 2010, Singapur creció un 14%".
  • Premian la excelencia, pero no segregando a los mejores expedientes, sino a través de dos exigentes reválidas. Sólo los mejores van a la universidad.
  • Han potenciado los institutos politécnicos. La Formación Profesional es de tres años y está basada en la investigación.
  • Se les exige mucho a los profesores (trabajan de 7 de la mañana a las 5 de la tarde), pero sus sueldos equivalen a los de los ingenieros y pueden mejorarse mediante cursos y evaluaciones anuales.
En Corea del Sur, expone los datos Sunwoong Kim, profesor de la universidad de Milwaukee:
  • "No debes pisar siquiera la sombra del maestro", dice un refrán coreano (aquí el equivalente sería "pisotea al maestro hasta quede echo sombra"...).
  • El 7% del PIB se dedica a educación, aunque las familias pagan más que el Gobierno.
  • Se premia el mérito y hay mucha competitividad: ser buen estudiante te lleva a la élite.
  • Envían a muchos alumnos al extranjero (75000 por los 3000 exiguos de España).
  • Exámenes de acceso a la universidad muy exigentes.
  • El 98% acaba la Secundaria (aunque habría que ver qué porcentaje de población puede acceder a ella, claro).
Conclusiones respecto a estos dos países: 
  • Sus presupuestos dedicados a la educación son muy superiores a España (aquí se destinaba un 5,7% en 2007, según el informe de la OCDE de 2010; en la Comunidad de Madrid los datos son más sangrantes: en 2010, un 2,46%, a la cola de las comunidades de España, datos sacados en Fapar).
  • Existe una carrera docente y una mayor inversión en el profesorado. No sólo se trata de pedir más dinero, sino de controlar el trabajo realizado. Aquí da igual dedicarte a actividades extraescolares, involucrarte en todo tipo de acciones, que tu consideración será la misma que el compañero que acostumbra a darse de baja en el mes de octubre, el catedrático que sigue dando los mismos apuntes que 30 años atrás, el que llega tarde, el que ni se sabe los nombres de los alumnos...
  • Las pruebas externas no sólo sirven para hacer el paripé de forma absurdamente inútil, sino que son reválidas exigentes. Adecuando un buen sistema de Formación Profesional para quienes no quieren cursar estudios universitarios.
Es hora de comenzar un debate en torno a la educación que queremos y sin compararnos a otros países (países con resultados y éxitos contrastados, no Francia y Alemania, donde, que yo sepa, tampoco tienen una reputación especial en los informes) no vamos a ninguna parte. Alguna vez, además, estaría bien contar con la opinión de quienes estamos implicados en la docencia. Al menos en los medios no convencionales podemos reflexionar. ¿Qué os parece todo esto? 
 
Continuará...

sábado, diciembre 24, 2011

229. Canción de Navidad

Adaptación libre de Canción de Navidad, de Charles Dickens.

Para empezar, la Pública había muerto. ¿Esperanza Scrooge lo sabía? Por supuesto que sí. ¿Cómo iba a ser de otra manera? Esperanza Scrooge era su principal administradora, pero no le afectó terriblemente el acontecimiento.

Esperanza Scrooge era una mujer huesuda, pecadora, de nariz puntiaguda, rostro arrugado (¡salvo en breves periodos de tiempo, los de las elecciones, donde rejuvenecía gracias al Photoshop), voz crispada , insulto fácil (lo que algunos ignorantes llamaban “decir las cosas por su nombre”). Una escarcha helada le cubría la cabeza, las cejas y la barbilla estropajosa. Lo peor, sin duda, era su afán privatizador, pues era una antítesis de Robin Hood: quitarle a los pobres para dárselo a los ricos. Por eso, jamás la paraba nadie por la calle para decirle con mirada sonriente “qué tal está?”, los pobres no le pedían limosna, los niños no le pedían la hora…

Aquella Nochebuena del año en el que había acumulado los mayores desagravios contra la Pública, algo que le hacía estar orgullosa y satisfecha, llegó a su palacio y se asustó al ver en la aldaba el color verde (color que había desterrado de todos sus aposentos). Esperanza Scrooge, sin embargo, no era mujer que se impresionara fácilmente, y negó con la cabeza: “¡Paparruchas!”. Subió hasta habitación y siguió con sus habituales rutinas, no sin antes acostarse hojeando los informes de sus subordinados, donde claramente se indicaba que por primera vez en mucho tiempo, los centros privados y concertados superaban a los públicos.

Entonces, se apareció el fantasma verde de la Pública.

–¿Qué quieres de mí? –le preguntó Esperanza Scrooge tratando de ocultar su pánico.

–¡Mucho! –le contestó el Fantasma verde mirándole fijamente a los ojos con esa expresión que sólo los condenados pueden albergar.

–¿Quién eres? –volvió a preguntar Scrooge.

–Pregúntame quién fui… En vida fui la Pública.

Esperanza Scrooge no creía en lo que estaba viendo y se lo dijo al espíritu de la Pública. Adujo que su aparición sería fruto de una indigestión, aunque el Fantasma de la Pública dio un grito tan lúgubre y espantoso que Esperanza se sujetó a la cama como pudo, cayendo de rodillas ante el espectro.

–¡Compasión! –dijo–. Atroz aparición, ¿por qué me torturas? ¿Por qué vienen los espíritus a la tierra y por qué se me aparecen a mí?

El espíritu le dio una explicación sobre compartir la felicidad en la tierra y de nuevo lanzó un grito y sacudió la cadena y sus sombrías manos. Esperanza Scrooge le preguntó por qué estaba encadenado.

–Llevo la cadena que me forjaste en vida. Me la hiciste eslabón a eslabón.

Esperanza Scrooge quiso que le contara más, pero el Fantasma de la Pública le dijo que no se le permitía contarle mucho más salvo que estaba allí para tratar de que se arrepintiera y reparara sus daños: “esta noche estoy aquí para advertirte que tienes todavía una oportunidad de cambiar mi destino. Recibirás la aparición de tres espíritus. Mañana el primero llegará cuando la campana dé la una. El segundo vendrá la noche siguiente a la misma hora, y el tercero cuando la última campanada de las doce haya dejado de vibrar. ¡Procura, por tu propio bien, acordarte de lo que ha pasado entre nosotros!

Dicho esto, el espectro cogió sus cadenas y salió por la ventana gimiendo y padeciéndose por su triste y adverso destino. Fuera, en la calle, se unía a otros fúnebres gritos de lamento, de pena, de pesar. La bruma se los llevó al cabo de un tiempo. Esperanza Scrooge cerró la ventana y examinó la puerta por la que había entrado el fantasma, que seguía cerrada con dos vueltas de llave (hacía no mucho habían intentado robarla). Intentó decir “¡Paparruchas!”, pero se detuvo en la primera sílaba y por la emoción de los avatares cayó en la cama y se quedó dormida en un instante.

Cuando Esperanza Scrooge se despertó estaba muy oscuro. Le parecía imposible haber dormido todo un día y parte de la noche siguiente. Miró por la ventana y seguía haciendo muchísimo frío y seguía habiendo muchísima niebla. Llegaron los cuartos de la hora señalada, y se alivió al ver que no había venido nadie, pero al instante un resplandor iluminó su dormitorio y una mano abrió las cortinas de su cama.

Una figura extraña que parecía un niño, se presentó: “Soy el espíritu de las Navidades pasadas. ¡Levántate y ven conmigo!”. Esperanza Scrooge estaba en zapatillas, bata y gorro de dormir, pero no opuso resistencia.  Le llevó hacia la ventana y traspasaron la pared para llegar a un camino en medio del campo.

–¡Santo cielo! –exclamó emocionada Esperanza Scrooge–. En este lugar me crié. ¡Aquí viví de niña!

–Estos son solo sombras de las cosas que han existido. Nadie es consciente de nuestra presencia.

Llegaron a una vieja escuela. “La escuela no se encuentra vacía del todo. Una niña solitaria, abandonada por sus compañeros, sigue ahí”. El espíritu le hizo comprender sin palabras que esa niña abandonada y reconcentrada en sus pensamientos había empezado a urdir un siniestro plan de venganza por haberse quedado sin amigos. No importaba que siempre en sus juegos propusiese ser la jefa y los demás sus sirvientes y que por eso se habían cansado de ella. Sin embargo, ahora la nostalgia le ahogaba y por eso se emocionó cuando el escenario cambió para adelantarse unos años más y vio que su escuela se caía a cachos antes de mudarse a un colegio de monjas.

Posteriores escenas de su adolescencia y juventud siguieron haciendo mella en su ánimo. Veía que en los posteriores colegios religiosos, rezando y yendo a misa sin descanso, con aquellos compañeros uniformados y redichos, no era tan feliz como cuando compartió estudios con aquellos pobrecitos que sufrían y soportaban sus desmanes y sus ínfulas de poder.

–¡Espíritu! –dijo Scrooge–, ¡no me enseñes más! ¡Llévame a casa!

Pero el espíritu de las Navidades pasadas le dijo que faltaba una sombra más, con lo que el punto culminante de aquella visita fue cuando se vio jovencita y lozana desdeñando al gran amor de su vida porque era un pobre paria que había estudiado en un instituto público.

De pronto todo el escenario se tornó negro y vio que había vuelto a su cama, donde cayó en un profundo sueño. Volvió a despertarse cerca de la una y fue ella misma quien descorrió la cortina para no llevarse otro sobresalto. Vio un resplandor en la habitación de al lado y oyó que la llamaban. Allí vio a un gigante con aspecto glorioso, que se presentó: “Soy el fantasma de las Navidades presentes. ¡Mírame!”. Le contó que tenía más de 2000 hermanos mayores y a continuación le exhortó a Scrooge que tocara su manto.

Eso le transportó a las calles sucias y contaminadas de su caótica ciudad, donde la lotería había pasado de largo y sin embargo la gente se esforzaba en mostrarse cordial y animada, tratando de pasar de largo por los problemas acuciantes de no tener empleo o de seguir padeciendo las amenazas de recortes, de bajadas de sueldos, de más horas de trabajo (incluso los domingos y festivos)… Continuaron, invisibles, la visita, metiéndose por los suburbios de la ciudad. Llegaron hasta un barrio humilde, una pequeña casa con un grupo alborotado de niños celebrando la Navidad con alegría a pesar de que no había calefacción y apenas un plato para cada uno. Esperanza Scrooge reconoció al hombre que acababa de entrar: uno de esos manifestantes indecentes que le habían pedido no cerrar el colegio público porque no podría permitirse el concertado lujoso que estaban a punto de estrenar.

Ese hombre cargaba con uno de sus hijos pequeños al hombro, un pequeño que necesitaba una pequeña muleta y un aparato metálico en las piernas. Se sentaron sobre la mesa y un pequeño refrito de productos casi caducados fue recibido con gran alborozo, sobre todo a la hora del ganso, que sabiamente la mujer había conseguido aderezar. “¡Feliz Navidad para todos!”, gritaron a coro. Esperanza Scrooge preguntó por el pequeño de las muletas y el Espíritu de las Navidades presentes le dijo que tendría que abandonar la escuela el año siguiente porque su amenaza de que la enseñanza no fuera obligatoria seguiría adelante.

Esperanza se sorprendió cuando se propuso un brindis en su honor: “¡Un brindis por la señora Esperanza Scrooge, la benefactora de la fiesta!”. Un poso de oscuridad se cernió sobre la familia. Sin duda, ella era el ogro de la familia. Cuando su visión se desvanecía, Scrooge tuvo los ojos puestos sobre todo en el pequeño de las muletas y siguieron visitando lugares humildes donde la educación se había convertido en un lujo que no se podían permitir, hospitales donde enfermos que esperaban meses de espera dejaban un hueco en sus corazones para disfrutar de la Navidad, casas de mendigos, cárceles y todo tipo de refugios de la miseria donde estaba vedado el paso de la educación.

Al terminar aquella agotadora noche, Esperanza Scrooge se fijó  en algo raro que sobresalía de la túnica del Espíritu: “¿Es un pie, o una garra?”.

–¡Hombre! Mira aquí. ¡Mira, mira aquí abajo!

Eran un niño y una niña. Amarillos, exiguos, harapientos, lobunos, postrados en su humildad.

–¿Espíritu, son tuyos?

–Son tuyos, se agarran a mí suplicantes apelando contra tus privatizadoras maniobras. Este chico es la ignorancia. La chica es la necesidad. Sé consciente de los dos, pero sobre todo sé consciente de su condena.

Nada más llegar de nuevo a la habitación de Esperanza Scrooge, la campana dio las doce. Un espectro solemne, cubierto y encapuchado, envuelto en un negro profundo que le ocultaba la cara y la figura, salvo su mano extendida, sustituyó al anterior. Era alto y majestuoso y su misteriosa presencia le infundía pavor, sobre todo porque no hablaba. Esperanza Scrooge preguntó:

–¿Estoy en presencia del Espíritu de las Navidades venideras?

El espíritu no contestó, sino que hizo un gesto con la mano señalando hacia delante. Sus ojos fantasmales la miraban fijamente, pero Esperanza Scrooge se armó de valor para seguir su sombra. Llegaron a un montón de escombros, bajo cuyos restos un grupo abigarrado de mendigos trataba de calentarse en los rescoldos de una fogata pestilente. Oyó cómo comentaban un luctuoso suceso, aunque ninguno mostraba mucho pesar. “Lo malo es que ya sea demasiado tarde y esta escuela pública no vuelva jamás a levantarse, el daño ya está hecho”.

Pasaron a otro escenario, una  miserable tienda de empeños. Dos mujeres y un hombre le estaban vendiendo una serie de objetos que habían robado en casa de la recientemente fenecida. Los tres defendían su derecho a subsistir, lección que habían aprendido precisamente de ella. Esperanza Scrooge se preguntaba de quién estarían hablando y temblaba ante la falta de misericordia de la que hacían gala. Ninguno le perdonaba que hubiera destruido el futuro de sus hijos y sólo se hubiese preocupado de los pudientes.

Llegaron hasta el lecho de muerte. Un velo la cubría, no así las cortinas de la cama, que habían sido arrancadas. La soledad era tan acentuada que Esperanza Scrooge rogó al espíritu que le llevara a alguien en la ciudad que se sintiera conmovido por la muerte de esta mujer. “¡Muéstramelo, espíritu, te lo suplico!”. Sin embargo, se trasladaron a un lugar donde el único sentimiento que había era el de alivio. Reconoció la casa de aquel hombre y su hijito tullido, y se entristeció al oír que se había descarriado cuando los orientadores tuvieron que irse a sus casas y cuando las tutorías se suprimieron para dar matemáticas intensivas que el chico no entendía. Ahora estaba en la cárcel, enganchado a la heroína.

A continuación, visitaron el camposanto, una vez que Esperanza Scrooge comprobó con extrañeza que su oficina estaba ocupada por otras personas. Al leer su propio nombre en la lápida, “ESPERANZA SCROOGE”, se echó de rodillas y lloró: “¡Oh, no! ¡Espíritu, escúchame! Ya no soy la misma mujer que antes. No seré quien podría haber sido si no fuera por tu intervención. ¿Por qué me enseñas esto si ya no tengo ninguna esperanza? ¡Asegúrame que estoy a tiempo para cambiar estas sombras que me has enseñado si cambio mi vida! Honraré las Navidades con todo mi corazón e intentaré mantener el espíritu de la Pública todo el año. Los espíritus del pasado, presente y futuro lucharán dentro de mí y no rechazaré las lecciones que me enseñen”.

Sostuvo la mano del espectro, pero el espíritu lo rechazó. Cuando se quiso dar cuenta, vio que estaba agarrando un pilar de la cama. Esperanza Scrooge se regocijó y se propuso cambiar desde ese mismo momento. No podía dejar que la excelencia fuera un asunto que lastrara a tanta gente, ni podía dejar en la estacada a tantas familias humildes. Se esforzó tanto en que la Pública no desapareciera, que pronto las subvenciones a los centros privados y concertados se tornaron en las ayudas que le hacía falta a la Pública. Dejó de perseguir el color verde y lo llevó por fin en su corazón, como símbolo de su propio nombre. Acogió al chico de las muletas proporcionándole una atención individualizada y una PT que le atendiera y prácticamente se convirtió en una segunda madre para él y para todos los alumnos de la Pública. Y lo mejor de todo es que recibía a cambio una inmensa alegría, y no tanto déficit como al principio temía. La comunidad prosperó y se la recordó como una dirigente que supo variar su política de estrechas miras y entró a formar parte de los escogidos que siempre se veneran.

FIN.

¡Felices y Verdes Fiestas para todos!

domingo, diciembre 18, 2011

228. AFDI (¿Ayuda a la Función Docente?)

Desde ayer llevo intentando meter las notas de la primera evaluación en el AFDI, nuestra queridísima herramienta para introducir faltas y notas, esa cosa que ya denunciaron unos valientes profes del IES Matías Bravo ante Rocío Albert López-Ibor, Directora General de Mejora de la Calidad de la Enseñanza, y Francisco López Rupérez, Presidente del Consejo Escolar de la Comunidad. Sí, esa aplicación nefasta que te hace perder tiempo, que no te permite cerrar sesión y que lleva casi dos días... así:

AFDI: no sabe, no responde

A las evidencias me remito de la calidad de la Enseñanza Pública que padecemos...

viernes, diciembre 16, 2011

227. Y más razones para manifestarse...

Ya circula por ahí una magnífica relación de 100 razones por las que seguir manifestándonos y no conformándonos contra nuestro adverso destino (a pesar de que está bien negro: somos como los chistes de los colmos: el colmo de ser funcionarios y el colmo de ser profesores y eso no se perdona así como así), pero cada día que pasa vamos sumando más motivos. Eso sí, por más que se explique una y otra vez (y en esto se lleva la palma Fernando) que no nos quejamos por nuestra situación económica, sino que defendemos un sistema justo como el que proporciona la educación pública, no terminan de adherírsenos todos los estratos sociales como cabría suponer.

De todos modos, tengamos o no ese apoyo en la sociedad, al menos nosotros, los profesores, los que sufrimos los efectos y las consecuencias de las dos horas de más, deberíamos tener muy presentes esas razones y otras muchas más para echarnos mañana a la calle:
  • Nuestra enemiga público número 1, Esperanza Aguirre, defiende la calidad de las escuelas católicas. No hace falta que lo diga más alto o más claro, no cree en la enseñanza pública y querría que se impartieran valores cristianos. "Ha llegado la hora del cambio que España necesita en muchos aspectos y por supuesto en la Educación". Y dice que hay que acabar con las medidas pedagógicas equivocadas como aprobar con cuatro suspensos (otra mentira más en su debe). Se debe de pensar que catequizando se estudiará mejor. 
 Ah, hablando de mentiras de las que acostumbramos padecer, supongo que los que viven en Madrid y utilizan el metro habrán visto la nueva e injuriosa campaña del metro, Más por menos, reivindicando el precio del billete sencillo (que subieron hace nada 50 céntimos) y que ya ha recibido réplica en Twitter, titulándola Menos por todo.


  • Otra: Percival Manglano (nos abstendremos de rimas fáciles y de burlas hirientes con ese nombrecito, por no hablar de la fotito que acompaña a la noticia), Consejero de Economía de la Comunidad de Madrid, habla de privatizar la economía, miente diciendo que el número de alumnos de la escuela pública lleva bajando 12 años (al menos omite que si baja es debido al incremento de centros privados y concertados) y se aferra a la cantinela demagógica de la libertad de elección de centros. Añade que el número de funcionarios bajará en torno a 800 el año que viene. ¿Tenemos que tragar con todas estas medidas de recortes? 
    El nuevo logo del PP
  • Más madera (aunque para muchos de los que trabajan en los institutos les debe de parecer madera mojada): "Los institutos madrileños sufren un recorte de un millón para gastos". Es decir, se recorta el dinero que se emplea para luz, calefacción, agua o teléfono. Se estima que el recorte es de 2.700 y 3.500 euros por centro, pero en el nuestro se ha traducido en 4800 euros. 
  • Juan Rossell (presidente de la CEOE) se permite el lujo de decir que sobran empleados públicos, de sanidad, de educación y de servicios sociales. CCOO ha contestado remitiéndose al informe "Administración and the Civil Service in the EU Member Status", que reseña que nuestro porcentaje de población activa en el sector público es del 13%, uno de los más bajos de Europa (que ronda el 16%), cifras que sólo nos sitúan por encima de países como Irlanda, Portugal o Grecia (que nos suenan de algo). Pero interesa difundir esta sarta de mentiras para encubrir el pastel.
  • CECOMA (ni me molesto en identificar sus siglas, simplemente hay que decir que son empresarios) le entrega un premio a Lucía Figar, pero lo mejor es el motivo del galardón: por "conseguir una educación de excelente calidad para todos los madrileños". Sólo se entiende como un ejercicio de terrorífica ironía. Por la misma regla de tres, a Carlos Aragonés, marido de nuestra queridísima consejera, le entregarán el premio al más dedicado trabajador del año (de momento ha recibido el premio al "diputado ausente").
En fin, que por más que está estudiado que invertir en educación es la medida más inteligente para salir de la crisis y que la enseñanza pública es la mejor, se nos presenta el panorama opuesto al que cabría esperar y eso hay que exigirlo saliendo a la calle. Y de momento, toca consolarnos al menos con cartas de solidaridad con los profesores. Algo es algo. Aunque esperemos que mañana seamos más que algo. Al menos, algunos muchos.

martes, diciembre 06, 2011

226. I foro de debate "La escuela pública del siglo XXI"

Ayer lunes, el colectivo de enseñantes de Móstoles inauguró el primer foro de debate con el título "La escuela pública del siglo XXI". A las 18:00, en el salón de actos del edificio de la Casa de la Cultura de Móstoles, hubo una mesa redonda en torno a la situación de la enseñanza pública madrileña. Una iniciativa estupenda para poder reflexionar sobre la situación actual en la que nos mostraron las posturas de los diferentes sectores educativos (pese a que, particularmente, me esperaba un mayor componente teórico sobre la Educación Pública). Peor es que sólo acudiéramos a 85 personas, y que algunos motivos aducidos para no asistir sean el derrotismo, el no podemos hacer nada.

Introdujo brevemente el tema Rosa Cano, directora del IES Europa, que hizo referencia al 6 de diciembre del 78, cuando se aprobó en Referéndum la Constitución española, que resalta la Educación como uno de los derechos fundamentales de los ciudadanos. Habló de las leyes educativas en este tiempo e hizo una defensa de la LOGSE, puesto que consagra la edad mínima a los 16 años en la enseñanza obligatoria y porque fue una apuesta por la escuela inclusiva, en oposición a esta búsqueda de la excelencia, una excusa para la segregación. En esta escuela, todos los estudiantes pueden recibir ayuda, independientemente de cualquier otro factor, pero este modelo está en peligro actualmente. Bajo la excusa de la crisis económica, se está desmantelando el Estado de Bienestar. Por último, hizo referencia a la Marea Verde, un movimiento en el que por primera vez se ha dicho ya está bien.

A continuación, tomó el turno de palabra Michi, de la junta de portavoces de la Escuela Infantil, que nos habló de la situación de la educación que va desde los 0 a los 6 años: en los últimos dos años, el decreto de mínimos recorta las posibilidades de atender a los niños sobre todo porque las ratios son desbordantes e impiden la atención individualizada, tan necesaria en esta etapa. Nos contó que las empresas de servicios se están encargando de la gestión de las escuelas y por tanto sólo se valora el Proyecto económico.

Le sucedió una compañera de Primaria, donde el principal problema de los recortes se centra en la eliminación de figuras tan importantes como la PT y la AL. Las ratios han subido y apenas se puede dedicar tiempo a los niños con otros idiomas porque las profes de compensatoria también están desapareciendo.

Rafael, del IES Santiago Rusiñol, excediéndose en el tiempo de palabra, habló de la masificación de los centros, de la pérdida de profesores (2500 el año pasado, 3200 este curso), de la supresión de desdobles, del cada vez menor número de profesores de compensatoria... Quiso reseñar que esta situación sólo está afectando a la Educación Pública, no a la Concertada y a la Privada, a quienes los recursos les siguen llegando.

Eva, como representante de Formación Profesional, habló de la implantación de la FP dual (modelo ligado al entorno productivo, a las empresas), aparte de los recortes que llevan muchos años y que afectan a la falta de desdobles, de dotación, de formación del profesorado, pero sobre todo del recorte de plazas: miles de alumnos no han encontrado plaza y están en lista de espera, pese a lo cual no se abren ciclos nuevos (entre otras cosas, porque las universidades privadas imparten el ciclo cobrando entre 700 y 1500€ al mes).

Susana, de la Universidad Complutense, nos contó los problemas de financiación que vienen sufriendo desde 2010. A pesar de la implantación del plan Bolonia, el nuevo sistema educativo no ha visto apenas financiación. Por culpa de esto, están estrangulando a las seis universidades públicas madrileñas.

Tomaron el turno dos alumnos universitarios. El primero retomó el plan Bolonia, con el que las asignaturas pasan a ser cuatrimestrales y la parte teórica se ve mermada, por no hablar de la clara orientación al mundo empresarial. Nos alertaron de la Estrategia universidad 2015 (aterrador el enlace, pero imprescindible para conocer este plan en profundidad), en la que las subvenciones públicas decrecen y aumentan el precio de las matrículas (un 50% la segunda matriculación y hasta en un 100% la tercera), por no hablar de la progresiva intrusión de las empresas. Se priman criterios económicos y carreras como Derecho o Historia quedan relegadas. 

Lo más grave es cómo los rectores pasan a ser elegidos a dedo por la Junta universitaria, que está compuesta por miembros externos al mundo universitario (Patricia Botín, Carlos Mayor Oreja). El profesor funcionario tiende a desaparecer, entre otras cosas porque el decano tiene libertad de contratación. Ángel Gabilondo (porque no todo es culpa del PP) ha "conseguido" que sea un Consejo social (ver enlace para conocer mejor su papel; el actual Consejo social de la Complutense está formado, agárrense, por dos patronos de la Fundación Caja Madrid, un directivo de una farmacéutica, el Consejero Director General de El Corte Inglés y un Consejero Delegado de Telefónica), quienes eligen la Junta de Gobierno que a su vez elige al Rector (que contratará al decano, y este al profesorado). Es decir, que ahora se parte de los empresarios en un sistema feudal inaudito.

Nos refirieron los dos nuevos sistemas de becas: las becas-préstamo, que más bien es una hipoteca porque la tienes que devolver nada más acabar el grado (entre 14.400 y 34.800€ de deuda). Por eso no es de extrañar que Lucía Figar declare que han subido las becas. Porque se tienen que devolver y con intereses. El otro tipo de becas son las beca-salario (el alumno, brillante en sus alocuciones y vehemente en sus valoraciones, las llamó beca-limosna), donde la mayor es de 6250€ al año (no llega ni a 500 € al mes) y sólo pueden optar a ella si el alumno pertenece a familias de al menos cuatro miembros que no ingresen al mes más de 1130€.

El alumno de la Complutense (chicarrón del norte) se pasma de que no haya una mayor movilización entre el alumnado, cuando deberían intensificar en los encierros y en las barricadas. Por dar cera, dio hasta los del 15M, encantados de haberse conocido y reunido, pero que no van más allá en sus propuestas y creen que el buen rollo va a provocar algún cambio. También los padres se lamentaron de que todavía haya muchos que no conozcan lo que está pasando, bien por indolencia, bien porque no hemos hecho llegar la información desde los centros de forma conveniente.

Al acabar dichos turnos, se hicieron varias reflexiones como reivindicar lo público frente a lo privado, que hay que dar mucha guerra, que se está abriendo una brecha social de 1ª magnitud, que no podemos consentir esta progresiva degradación de los servicios públicos, que tenemos unos políticos mediocres e incompetentes (al servicio de unos pocos) que han de encontrar alguna respuesta en la ciudadanía y que es necesaria una revolución para que no nos dejemos engañar por mercados y cuestiones económicas que disfrazan que se está procurando un sistema educativo que persista este sistema injusto de desigualdades sociales, un sistema educativo ligado a la producción mercantil en donde los privilegiados podrán recibir los conocimientos, mientras que la mayoría apenas tendrá derecho a seguir siendo una manada de borregos y mano barata de obra. Se prevé una lucha larga y ardua, pero actos como estos son la primera piedra para levantar un muro contra estos ataques a lo público.

sábado, diciembre 03, 2011

225. A lo mejor tampoco son recortes

Paso primero:


La número 2 del PP ha hecho públicos sus planes o sus recetas para salir de la crisis. ¿Y quién tiene que sacarnos de la crisis? Estaba cantado: nosotros, los pobres parias funcionarios. Ah, pero eso sí, si tú me estás leyendo y no lo eres, no cantes victoria tan temprano, que las medidas de ajuste (que no recortes, por favor, esta palabra está prohibida, y si no, al tiempo, que estará tan perseguida como nuestra peligrosa y subversiva camiseta verde) también te van a afectar a ti: 

El copago (o, mejor dicho, repago, que para algo están los impuestos) en Sanidad lo vas a sufrir también tú; si tanto nos envidias y quieres formar parte de esa casta privilegiada no podrás porque se han eliminado las convocatorias de empleo público para 2012; dile adiós a la gratuidad de los libros (pero si estás en un cole privado o concertado y tienes uniforme, tranquilo, que te desgravará); dile también adiós a la posibilidad de una vivienda protegida; los servicios sociales (que a lo mejor no sabes qué significa, pero mucha gente que no tiene nada depende de ella) se los pulen; e incluso las subvenciones para el sector agrícola se quitan.

Sí, los coches de alta gama fuera (ya era hora, ¿no?, ¿o quieren que encima les aplaudamos?) y se reducen los altos cargos en un 60% (y todavía sobrará un 40%). En este austero plan de reajustes (que no recortes, insisto), no he leído nada de bajarse el sueldo a ellos mismos. Eso por no ser funcionarios los políticos, claro, porque somos los únicos privilegiados (no encuentro el enlace de ayer por la tarde, pero la Cospe ha vuelto a repetirlo y ya me toca los huevos) en este país. A lo mejor por llevar a cabo estas medidas tan estresantes se tienen que subir el sueldo, como los de CIU en Cataluña. Sus indecentes privilegios no serán recortados (digo, reajustados), ni tampoco verán la cárcel a pesar de años y años de corrupción (tema tabú en las elecciones a pesar de la que está cayendo con Urdangarín, donde debe de estar pringado hasta el apuntador, y, vaya por Dios, el apuntador de nuevo se relaciona con Camps).

Todo se privatiza, sanidad y educación para quien pueda permitírselo y con eso básicamente saldremos de la crisis. Es lógico: el funcionario es la rémora de España y ya que es un ser tan privilegiado, que trabaje más y que cobre menos y si eres interino qué es eso de los dos meses de vacaciones, sólo cobras según la proporción de días trabajados, que por algo no te has sacado las oposiciones, inútil. Y que no se queje ni proteste nadie, que la situación está muy malita y los 5 millones de parados (que nuestros políticos nos han endilgado) no entenderían que lo hiciéramos (con el añadido de que si no se efectuasen estos tijeretazos, los partidos políticos no podrían repartirse 2.200.000€ en subvenciones para fundaciones y asociaciones dependientes de partidos políticos (ver BOE)).

Pero si yo sigo viendo cómo la red de centros concertados se sigue fortaleciendo e incluso una propuesta es que "se compatibilizará la educación pública con la privada y concertada" (¿?, yo por si acaso me pondré a repasar el Padre Nuestro); si mi formación profesional se ve perjudicada (los 33 centros de profesores y recursos que existen actualmente se verán reducidos a un solo centro); si me suben las horas de trabajo y encima me vuelven a bajar el sueldo; si para más inri se atreve a seguir hablando de la incongruente ley de la autoridad del docente como si nos hicieran algún favor o como si eso fuera el maná de las mejoras educativas, como para ellos el programa de bilingüismo (que en la práctica supone que nuestros alumnos no sabrán hablar ni inglés ni castellano) lo es para preconizar una calidad de la enseñanza; si veo cómo un país desarrollado como en teoría es el nuestro se puede permitir el lujo de recortar 834 millones en sanidad y 460 millones en Educación pública, si yo veo todos esos reajustes (qué coño, si esto no son recortes, también yo me he vuelto gilipollas), tengo no sólo el derecho, sino la obligación a quejarme, protestar y movilizarme, y es algo que debería hacer la mayoría de la sociedad. 

Porque lo que Cospedal propone es lo que Esperanza Aguirre ha establecido (como dice el impresentable ese del Arturo Fernández: "Rajoy hará un gobierno donde el espejo será Esperanza Aguirre”) y será la línea a seguir por Rajoy después. Dice ella que "el sudor de hoy aleje las lágrimas de mañana”, pero nada dice de su incompetencia para elaborar un discurso que incluya una subordinada en esa oratoria disfuncional suya. Es como pasa con la bajada de sueldo a funcionarios y las subidas suyas, como pasa con los recortes en el estado de bienestar común y los privilegios en dietas, iphones, planes de jubilación, etc. suyos. Si esto no es injusticia, se le parece mucho.

domingo, noviembre 27, 2011

224. Campañas propagandísticas

Estamos acostumbrados a convivir con la publicidad y no nos extraña ya casi nada. Pero cuando te paras a pensar en ciertos usos de las campañas propagandísticas sí que te rechinan ciertos aspectos. Por ejemplo, cuando no nos dejan de recordar la crisis en la que estamos inmersos a través de los necesarios y profundos recortes en la Educación Pública (porque para a la privada no hay que privarles de nada), ves los despilfarros con campañas publicitarias como la del "Nos gusta cómo despilfarras" y no sabes en qué quedamos:

Y es que desde hace meses nos acompañan ciudadanos urbanos haciendo todo tipo de bailes y contorsionismos, que sin duda representan las piruetas gimnásticas a las que te ves expuesto en hora punta para pillar un metro o acomodarte por las atestadas escaleras (las mecánicas no funcionan). Pronto estas figuras se pondrán el gorro navideño y abrigos más tupidos (previa nueva partida presupuestaria de antemano, claro) para anunciar el "Nos gusta cómo gastas tu dinero", digo, que se refuerzan las líneas de metro en estas festivas fechas donde el caro alumbrado navideño no puede faltar (pero sí en cambio la educación pública, que hay que priorizar).

No me quiero remontar a la infausta (y carísima) campaña en apoyo del profesorado, la más inútil de la historia, puesto que pocos meses después se encargarían Esperanza Aguirre, Lucía Figar, Ana Botella y alguno más como el recientemente cesado Alberto Granados de echarla por tierra insultándonos y menospreciándonos.
¿Algún profe se identificó con estos repelentes docentes, por cierto?

 Bueno, pues si pensabas que lo habías visto todo es que te faltaba en tu vida un... ¡ciberamigo! Esta es la manera más ingeniosa que se le ha ocurrido a la Comunidad de Madrid de luchar contra el ciberbullyng, porque ya está dicho, en las clases se va a instruir, no a educar. Y donde esté este ciberrobot que se quiten los carcaprofesores. Los niños, adolescentes y universitarios (porque el cartelito ya sólo lo he visto últimamente en la estación de Hospital de Fuenlabrada, la de la universidad Rey Juan Carlos) ya saben que si alguien le hace la vida imposible tiene a este ciberpersonaje a su ciberposición para que le cibersolucione sus ciberproblemas. Y todo gracias a nuestra CiberPresidenta.

Que se dejen de cibergilipolleces y si hay que ahorrar, que ahorren de verdad, que las mentiras empiezan a creérselas cada vez menos (muy interesante la reflexión en Ventanas del Falcón al respecto).


domingo, noviembre 20, 2011

223. ¿Libertad de expresión?

Los medios de comunicación no masivos (twitter, blogs) están denunciando algo que clama a los cielos y que sin embargo no pasa a ocupar ni un mísero espacio en las radios o las teles o la prensa. Todo transcurre con normalidad, dicen. ¿Todo transcurre con normalidad? ¿Es normal estos casos que se están conociendo? Fernando denuncia lo que ha pasado con una compañera suya, en Soy Pública recopilan una serie de sangrantes ejemplos, profesorgeohistoria añade dos enlaces (uno de Europa Press y otro de Madrid2noticias). Para rematar, en Plataforma de profesores y maestros interinos, hay una captura de pantalla del eskup donde a diez compañeros no les han dejado votar con la camiseta verde.

Eva, liberada de CCOO en la zona de Móstoles e incansable promotora de iniciativas y actividades, había preguntado a los servicios jurídicos del sindicato si se podía votar o estar en una mesa con la camiseta verde. Copio lo que nos escribió en un correo:

La camiseta verde por la escuela pública pueden llevarlas todos los votantes que quieran.
Con respecto a los presidentes y vocales de mesa, al no estar el lema de la campaña asociado a ningún partido político, también podrían llevarlo salvo que lo indicase la junta electoral de zona.
En todos los colegios hay una persona que representa a la junta electoral. Si algún interventor o algún votante pone algún problema porque un miembro de la mesa lleve la camiseta verde, tendrá que comunicarlo a la persona representante de la junta para que lo transmita y se determine cómo se debe actuar. Así es que la persona que nos ha aconsejado nos dice que llevemos las camisetas si queremos, que no nos las cambiemos aunque lo propongan o presionen los interventores, pero que llevemos otra por si hay una instrucción de la junta electoral.
Eso debe de ocurrir en otra ciudad que no sea la nuestra donde los peligrosos docentes o cualquier ciudadano que porte la peligrosa camiseta verde y su más peligroso lema: "Educación de tod@s y para tod@s" no siembren el pánico o insten a la insurrección. 

Ya los sondeos indican la previsible mayoría de este partido que, por lo menos en Madrid, recorta no sólo nuestra enseñanza pública, sino también nuestros derechos.

sábado, noviembre 19, 2011

222. Jornada de reflexión (personal)

Entiendo que los empresarios que deséais seguir ganando dinero a costa, entre otras medidas que proponéis, de despidos improcedentes, votéis al PP porque suyas harán las medidas que CEOE propugnan y lograréis ganar más dinero a costa del trabajador al que incluso le queréis recortar su derecho a las huelgas.

Entiendo que los católicos recalcitrantes que tanto disfrutasteis con el regreso a los años 50 y 60 con la desmedida JMJ (el enlace va a la tienda online, por si queréis pagar por algún artículo, que estos no los persigue Esperanza Aguirre, al contrario que a los que venden camisetas verdes) votéis al PP porque la Iglesia, de hecho, se posiciona a favor de este partido.

Entiendo que los franquistas nostálgicos votéis al PP porque es lo que más se le parece (sólo hay que ver la cintura negociadora de la Comunidad de Madrid encarando 9 huelgas, o los expedientes abiertos a compañeros, o las medidas que vetan temas en el temario de literatura universal) y hay que volver a los tiempos de la mano dura.

Entiendo que los que abomináis del PSOE porque nos han llevado a la ruina otra vez votéis al PP, no vaya a ser que al final las encuestas fallen y no tengan la mayoría que les asegure campar a sus anchas, y es que si incluso antes de las elecciones ya auguran medidas que van a propiciar protestas (ojo, protestas, que en ningún momento Cospedal habla de dialogar y tratar de convencer que sus medidas son las necesarias, ya adelanta que se van a imponer y a quien le guste bien, y a quien no, que proteste y patalee, que les va a dar igual), no tardaremos mucho en apretarnos el cinturón (y agarrarnos a nuestros asientos).

Entiendo que ese porcentaje reducido de la población que poséeis mucho patrimonio y mucho dinero votéis al PP porque os aseguráis seguir instalados en vuestros privilegios (gracias, por ejemplo, a las desgravaciones por llevar libremente y porque os lo podéis permitir por llevar a vuestros hijos a colegios privados o concertados).

Entiendo que los antiabortistas, los homófobos, los fumadores que echan de menos ahumarnos a los demás en los bares o los que piensan que es un derroche la ley de Dependencia votéis al PP porque siempre ha habido clases y distinciones y ya está bien de que los progres campen a sus anchas y se dejen de derechos civiles.

Lo que no entiendo es que votéis al PP quienes necesitáis de la Seguridad Social y en los servicios públicos y el estado de bienestar en general, los que creéis en un reparto más equitativo en la sociedad, los que estáis en contra de la manipulación informativa, los que pensáis que buena parte de los males de esta crisis se la debemos al capitalismo especulador de los mercados y a los intereses de la banca...

Y, sobre todo, lo que no entiendo es que votéis al PP los que trabajáis en institutos o colegios públicos.

lunes, noviembre 14, 2011

221. Un caso real y concreto de la pública

Teresa es guineana. Vino a España a finales de septiembre y, aunque empezó en 3º de la ESO por edad, se consiguió bajarla a 1º de la ESO, aunque su nivel curricular podría equivaler a 2º grado de Primaria.

Estuvo en mi clase menos de una semana y la pobre no se enteraba de nada y parecía asustada por todo. Normal. Este grupo, pese a que no es malo, es un poco caótico y es difícil mantener si no el silencio, sí al menos un poco de orden. Apenas pude prestarle atención y eso que es un grupo pequeño al ser la referencia del grupo de diversificación. Ahora me pesa, veréis por qué:

Hablo de Teresa pero resulta que Teresa no se llama así y tampoco su edad es la que figura en sus papeles. Están falsificados para que pudiera entrar a España. Sus padres están en Guinea y vivía con la prima de su madre (al menos al principio) y quince personas más en un pequeño piso sin calefacción, cuidando de la hija de cuatro años de esta prima, que por lo visto volvió a Guinea dejando a la niña al cuidado de otra niña.

En una tutoría (de esas que la Comunidad de Madrid podría permitirse suprimir) se habló de los malos tratos y aunque en ese momento no demostró ninguna reacción (parece como bloqueada, como ausente, su rostro es una especie de máscara), al día siguiente, en clase de compensatoria (con la media profesora de compensatoria que comparte centro gracias a los recortes), rompió a llorar. Preguntándole, mi compañera se enteró de que la niña recibía insultos, vejaciones y golpes. Y eso era sólo la punta del iceberg. La cosa era tan seria que se derivó a la orientadora. Las dos, junto con el director, estuvieron el viernes en comisaría desde las dos y media hasta las ocho de la tarde para trasladar la denuncia (y eso que probablemente habrían superado esas 20 horas semanales que trabajan según nuestra Presidenta o nuestra futura alcaldesa).

Ahora Teresa, o como quiera que se llame, puede esbozar por primera vez desde que llegó a España alguna sonrisa porque, imagino que gracias a los Servicios Sociales (otro servicio público donde los recortes se han dejado notar, pero esa es otra historia), está en una residencia, no pasa frío, no tiene que encargarse de ningún niño pequeño a cambio de amenazas y humillaciones, no tiene por qué levantarse a las seis de la mañana ni acostarse a las doce de la noche (para hacer los deberes a partir de las once), no volverá a pasar hambre y podrá incluso permitirse tener ropa interior, así como ropa de abrigo.

Me decía nuestro director que lo que le preocupa (aparte de conseguirle los libros de texto, aunque sea a costa del exiguo presupuesto del centro) es cuántas Teresas podemos tener en nuestras aulas sin que nos enteremos, cuántos casos que exigen nuestra implicación y nuestra cada vez mayor falta de recursos se estarán produciendo. Es un pensamiento que no se tienen ni que plantear los centros concertados. Esos niños no pisan sus centros, a pesar de que también los pagamos.

Expongo este caso concreto porque me parece la mejor manera de defender a la Pública. Y quiero que sea concreto porque estoy harto de las generalidades con las que unos van a ganar las elecciones, diciendo que "la creación de empleo es la más importante de las políticas sociales", señalando vacuamente que la inmigración es uno de los grandes retos del siglo XXI, instándonos a sumarnos por el cambio, recordándonos que la sanidad es una de sus prioridades (no como la educación, que ni aparece en el apartado de las ideas de su página web), a pesar de que no se molestan ni en especificar cómo van a conseguirlo. 

Todos deberían saber el calado de una política que recorta en este tipo de cuestiones y que ponen en peligro a todas las Teresas que siguen sin encontrar ayuda antes de entregar su voto sin pensarlo bien. Porque las generalidades encubren futuras acciones que atentan contra Teresa. ¿O es que de verdad creen todavía que el jueves 17 vamos a nuestra octava jornada de huelga por dos horas de más, o que el conflicto educativo está solucionado porque seguimos dando clase?

jueves, noviembre 10, 2011

220. Rechazar o no rechazar la PGA

Últimamente, una de las acciones más jaleadas y aplaudidas consiste en rechazar la PGA por parte de los Claustros. En principio, se trata de otra medida de protesta y de presión por parte del profesorado. Se toma como referente una parte de la PGA, el DOC (documento donde figuran nuestros horarios, todos ilegales y por tanto firmados con el "no conforme), pero el resto de la PGA es un documento elaborado, entre otros, por cada uno de los departamentos. En este documento figuran todos los elementos que se van a seguir a lo largo del curso. Rechazar algo que tú mismo has contribuido a sacar adelante no parece una medida demasiado inteligente, y más cuando cada departamento (se supone) va a mostrar todo lo que no se podrá llevar a cabo durante el curso. Esa parece la principal medida de protesta: hacer constar y hacer llegar todo lo que ha supuesto esta política de recortes hacia la Pública. Que inspección lea lo que por culpa de los recortes se ha dejado de hacer (actividades extraescolares, desdobles, planes de mejora...). Además, nuestro director nos ha dicho que el rechazo de la PGA lo único que conseguiría es retrasar la reclamación de nuestros horarios, y que se tendría que volver a elaborar y a votar (y así indefinidamente). Incluso, si dentro del plazo de un mes, no estuviera entregada, se podría dar el caso de que no cobraríamos porque no estaríamos cumpliendo con la ley. Algo que está, por lo visto, esperando la Consejería de Educación, que pretende dejar pasar el tiempo para que se pasen los plazos para las reclamaciones. Así que, pese a mis dudas, hoy he votado que sí a la PGA (aunque otra cosa que no se suele decir en los foros o en los blogs donde se habla de rechazarla: la votación es simplemente orientativa, nosotros no decidimos nada; así que si hemos votado es para que nuestros representantes en el Consejo Escolar, los que tienen que votar realmente, supieran el sentir de los compañeros y votar en consecuencia). Eso sí, nada de hablar de cómo están las movilizaciones, o aprovechar para realizar una asamblea ahora que estábamos todos reunidos. Para qué, no vaya a ser que se descubra que no les interesa.

lunes, noviembre 07, 2011

219. Debate Rajoy-Rubalcaba incidiendo en los aspectos sociales

Decepcionante intervención de Rubalcaba después de defenderse en la 1ª parte del debate como ha podido de los temas económicos donde el PSOE no tenía nada que defender. En un punto donde podía haber alertado (como ha ido haciendo en puntos anteriores) de la política del PP, en educación, donde la situación madrileña es el indicio de lo que le espera al estado, ha dejado transcurrir todas las intervenciones hasta la última para hablar del tema de educación. Voy a analizar las respuestas punto por punto:
  • 1ª intervención de Rajoy: en vez de hablar de su política o de sus propuestas, se sale por la tangente y habla de que los servicios públicos se pueden mantener creando empleo. Critica al PSOE por ese motivo.
  • 1ª intervención de Rubalcaba: habla de que hay que preservar, mantener y mejorar la sanidad. Pregunta por la propuesta de financiación del PP, que en algunas Comunidades se rigen por medidas privatizadoras: los hospitales privados se quedan con los pacientes menos costosos y cargan a los públicos con los más caros, con lo que peligra así el sistema. Es lo que pasa con el sistema educativo: el rechazo a los alumnos difíciles hace que pasen a la pública. Y habla de impedir conciertos.
  • 2ª Rajoy: vuelta a criticar al PSOE y que generar empleo y subir IRPF supone financiar en sanidad. Va a las pensiones (compromiso irrenunciable, bla bla), pero a criticar la congelación de pensiones del PSOE, haciendo referencia a una ley del 98 (¿?). Datos y más datos del pasado y comparativos. Seguimos sin propuestas suyas.
  • 2ª Rubalcaba: mención a la financiación de la sanidad pública del PP. Ejemplo de la Comunidad de Madrid: suben los fondos a la privada y bajan en la pública. Y defiende que las pensiones mínimas han mejorado con su partido mucho más que con el PP en tiempos de bonanza. Y se refiere a la página 116 sobre el informe de evaluar cada dos años el sistema de pensiones.
  • 3ª Rajoy: defiende (otra vez) la sanidad pública por medio de los impuestos. Dice que no conoce la privatización en España (¿¿¿???) y habla que en Cataluña, durante el gobierno socialista, la gestión privada supone un 22% (en atención primaria, por ejemplo). Dice defender una sanidad universal y gratuita. Vuelve a la congelación de pensiones. Y critica los recortes en servicios sociales.
  • 3ª Rubalcaba: vuelta (cansinamente) a la página 116 del programa del PP, a la incertidumbre que se crea con la revisión cada dos años del sistema de pensiones. Habla de la redacción deliberadamente peligrosa del programa del PP, de la incertidumbre creada por la calculada ambigüedad.
  • 4ª (y última) Rajoy: ¡¡es él quien tiene que sacar el tema de la educación, manda narices!! Dice que quiere igualdad de oportunidades (caray). Habla del problema de calidad, de que ha caído el esfuerzo, el mérito, la excelencia... (esto me suena de algo, ¿verdad, Esperanza Aguirre?). Dice que durante el gobierno socialista se ha llegado a aprobar con 4 suspensos (algo totalmente falso), no se premia el esfuerzo y hay que reforzar la figura del profesor (¡me da un ataqueeee!). Quiere (ojo, que son las primeras propuestas que aparecen) meter el inglés desde los 3 años (imaginamos que a través del famoso bilingüismo del que tanto alardean y que tanto daño está haciendo en el sistema educativo), reformar la FP (y que el trabajo tenga valor académico, como en Alemania). Y mejorar la calidad. Critica aquel intento de pacto educativo sin cambiar la ley (aquí entiendo que van a querer volver a aquella tremebunda y dañina LOCE) y vuelve a hablar de los recortes del PSOE.
  • 4ª (y última) Rubalcaba: sigue con la sanidad, con la derivación de enfermos costosos para mantener el negocio de las empresas privadas. Y va, por fin, a la situación de la educación madrileña (Rajoy interrumpe para decir que en el informe PISA estamos de los mejores): habla de los colegios privados y concertados, que suponen en Madrid un 50% de los centros educativos. Y, por fin, ya que Rajoy se lo ha puesto a huevo, se ríe de aquello de que hablen de la autoridad de los profesores cuando la Presidenta de la Comunidad de Madrid ha llamado a los profesores vagos que no quieren trabajar (Rajoy vuelve a interrumpir diciendo que eso es falso. Joder, ¿me tengo que creer a un político que miente tan deliberadamente?), los ha puesto a caldo. Habla de que los profesores hacen huelgas, sobre todo por razones como la desgravación para los colegios de élite (que Rajoy, de nuevo nervioso, interrumpe y dice que es falso, que la desgravación es para todos, para pagar libros de texto y uniformes). Madrid, avanzadilla para el PP, atenta a la igualdad pública que el PP defiende. Por tanto, sanidad y educación pública no quedan garantizados para él.

Para mi gusto, Rubalcaba ha perdido una inmejorable oportunidad para incidir en la política educativa del PP, extensible a la sanidad. Aunque casi lo peor es que no ha realizado ninguna propuesta para el futuro (tampoco lo hace en su programa). Un debate donde se tiran los trastos y ninguno propone nada dice mucho de lo que nos espera del bipartidismo español. Si de algo me ha servido este debate es que no se puede votar tampoco al PSOE, aunque es cierto que el PP, el probable ganador, encima nos supone un futuro tenebroso en el bienestar social.

domingo, noviembre 06, 2011

218. Propuesta de paros parciales

Indudablemente, el seguimiento a las huelgas está decayendo. Tenemos la razón, pero también hay que ver el asunto con perspectiva: ya van siete huelgas y casi 1000 euros para las arcas de Esperanza Aguirre (aunque hay iniciativas para que el dinero se revierta en la pública, pincha aquí). Hay quien defiende que una huelga cada dos semanas no hace ningún daño y no sirve para nada y por eso piden dos o tres semanales, pero salvo ese grupo minoritario que se retroalimenta de sí mismo, ese no es el sentir generalizado, en el que el cansancio se va notando. No digo que dejemos las huelgas, pero deberíamos mirar otras opciones que fueran más mayoritarias (sin que fueran excluyentes con otras medidas, como se indica en el documento).

En este sentido, os traslado la razonable (y bien razonada) propuesta que transmiten nuestros compañeros del IES Antonio Gala (Móstoles), que puede dar mucho juego. Viene bien, además, cambiar un poco el signo de nuestras protestas por aquello de la repercursión en los medios, que podrían volver a hacernos caso si propusiéramos otras alternativas. En fin, lo copio y a ver qué os parece a vosotros:

PROPUESTA DE PARO  PARA PRESENTAR EN LA ASAMBLEA DEL DÍA 10 DE NOVIEMBRE (ESTA PROPUESTA SE LLEVÓ A LA ASAMBLEA DE MÓSTOLES DEL DÍA 2).

ASAMBLEA DE PROFESORES DEL IES ANTONIO GALA

Establecer, con carácter indefinido, un PARO DE 2 HORAS UN DÍA A LA SEMANA.

Las horas podrían ir rotando: 1ª y 2ªh. la 1ª semana; 3ª y 4ªh. la 2ª semana; 5ª y 6ªh. la 3ª semana y vuelta a empezar.

VENTAJAS SOBRE LAS HUELGAS DE DÍA COMPLETO:

1.- Académicas. Se perderían muchas menos horas de clase y, además, no serían las mismas, algo especialmente importante para los alumnos de 2º de Bachillerato.

2.- Permitiría mantener el conflicto presente en los medios de comunicación todas las semanas, y evitaría que decayese el ánimo de los profesores al ver la continuidad del movimiento.

3.- Crearía problemas reales a los Centros, ya que, a diferencia de un día de huelga, todos los alumnos estarían en el Centro y se quedarían sin profesorado durante dos horas.

4.- Dificultaría la tarea a Nóminas porque tendrían que comprobar, profesor por profesor, cuántas horas debían descontar, puesto que habrá profesores que hagan el paro pero que para ellos sólo sea de una hora, porque no tenían la 1ª, o porque no tenían la 6ª, o porque tenían un hueco… Y, además, al ser horas distintas cada semana, tendrían que hacer la misma operación cada semana.

5.- Económicas: Teniendo en cuenta lo explicado en el punto anterior, a final de mes nos saldría a descontar, más o menos, 1 día de huelga, un coste que podría ser asumido por la mayor parte del profesorado y que permitiría mantener un porcentaje de participación elevado.

6.- Durante esas dos horas se podría salir a la calle, incluso con los alumnos de Bachillerato que quisieran participar, y juntarse con el profesorado de los Centros más próximos. De esa manera la protesta sería más visible.

7.- Al tener carácter indefinido, evitaría las constantes asambleas y haría innecesarias las consultas continuas sobre cuántos días de huelga y en qué fechas, lo que disminuiría la presión sobre el profesorado y daría más seguridad.

A ESTA PROPUESTA DE PAROS PARCIALES  HABRÍA QUE AÑADIR LA CELEBRACIÓN DE UNA GRAN MANIFESTACIÓN MENSUAL (PREFERIBLEMENTE SÁBADO POR LA MAÑANA, PARA FAVORECER LA PARTICIPACIÓN DE PADRES Y ALUMNOS).

                                                                     Móstoles  2- 11- 11

viernes, noviembre 04, 2011

217. Carta contra los recortes en la educación pública madrileña

Desde Madrilonia se propone hacer llegar un mensaje a los responsables que han llevado a cabo las medidas en contra de la Escuela Pública (lo podéis ver en la barra lateral derecha). Después de escribir mi carta y enviarla, me he encontrado con que luego, en el correo que te llega, para completar el proceso haciendo click en el enlace que te facilitan, resulta que no he podido completar la jugada, de modo que, por si a alguien le ha pasado lo mismo, añado las cuentas de correo electrónico a las que dirigir las protestas e incluyo lo que he escrito.

Os animo a que secundéis la iniciativa, bien por el cauce de la plataforma, bien directamente a través del propio correo electrónico. A mí nadie me ha respondido de momento, pero con hacerles llegar nuestras quejas y sabiendo que sus buzones de entrada pueden rebosar con nuestras reivindicaciones tengo suficiente:

Para: eaguirre@asambleamadrid.es; lfigar@asambleamadrid.es; adelibes@asambleamadrid.es; jvalverde@asambleamadrid.es; atencion2@pp.es.

Asunto: En defensa de la Educación Pública

Estimadas Aguirre, Figar y Delibes:

Aunque sé que la política de su partido y de ustedes en particular va encaminada a favorecer la educación privada, no pueden dejar de pensar que las sociedades modernas se basan en un modelo donde la pública es el eje central. Vamos de camino a un desequilibrio que será difícil de reestablecer, ahora que los centros públicos son tan sólo la mitad de los centros educativos de la Comunidad de Madrid. De todas maneras, incluso si obviamos que buena parte del presupuesto en educación va hacia fines privados, la partida presupuestaria de una comunidad como la de Madrid no puede estar por debajo de la media del Estado. Más que recortar (o que ahorrar) en aspectos sociales tan importantes como educación, deberían potenciarlos. El ahorro no puede venir como consecuencia de privaciones a los ciudadanos en sus derechos sociales. Deberían dejar la 'i' que de momento antecede a su cargo de responsables y trabajar decididamente para resolver esta situación.

Asimismo, me parece inaudito y una muestra de su escaso talante democrático que después de seis huelgas, a punto de la séptima, después de encierros, concentraciones, huelgas y demás medidas, no se hayan dignado a negociar con los representantes de nosotros los profesores, los sindicatos (y no nos vale que argumenten la pantomima de que ya los citaron y les dieron plantón: ustedes fijaron como único punto del día hablar de las subidas parciales a tutores, jefes de departamento y tics, cuando lo relevante eran las sibilinas instrucciones de principio de curso). Nos merecemos un poquito más de respeto, por no decir que nos ampara la Constitución el derecho a la negociación para llegar a un acuerdo (Real Decreto-ley 17/1977, de 4 de marzo, sobre Relaciones de Trabajo. (TÍTULO I. EL DERECHO DE HUELGA. CAPÍTULO I. LA HUELGA.BOE número 58 de 9/3/1977)). Considero que la movilización ha sido lo suficientemente significativa como para que nos tomen en consideración y al menos se debatan estas cuestionables medidas.

Por último, me gustaría apuntar la posibilidad de ahorrar a través de otras medidas: gástense menos en publicidad (y más si van a socavar ustedes con sus arbitrarias, irrespetuosas e hirientes declaraciones aquello que defienden, como aquello de "respetemos y apoyemos a nuestros profesores"), recorten en asesores (y enchufados varios), olviden sus insultantes desgravaciones para aquellos que libremente eligen una educación que se pueden permitir, recórtense sus sueldos, cambien la insultante situación ventajista e impopular de recibir dietas, escoltas, coches oficiales, puestos vitalicios, sueldos por cada cargo y pensiones abusivas. Su partido propone en muchas ocasiones un modelo de política que se basa en el esfuerzo y en los resultados, pero cuando se trata de ustedes no aplican el mismo rasero: entre unos y otros (porque no vale con echar balones fuera y decir que todo es culpa exclusiva del Gobierno estatal) nos han llevado a una situación de paro y precariedad inadmisibles y pese a ello siguen disfrutando de sueldos que no se merecen, ni mucho menos.

Tarde o temprano, esta política privatizadora basada en las desigualdades y las injusticias les pasará factura, así que espero que se olviden de sus planes "evangelizadores" y defiendan lo que debería ser uno de nuestros mayores orgullos: la educación pública.

Les saluda cordialmente,
Julián 

martes, noviembre 01, 2011

216. El momento más difícil: focos fuera

Muchas veces, el proceso de las noticias en la prensa se rige por el efecto de impacto y no por el objetivo de transmitir objetivamente la realidad. Estoy pensando ahora mismo en el llamado "cuerno de África". En el mes de agosto, durante una semana, dos a lo máximo en aquellos pertinaces medios, se nos inundó de avisos sobre la urgente situación en la que se encontraban miles de personas que no tenían nada para comer. La sociedad se alarmó, se hizo de cruces, actuó en algunos casos y pasó página, olvidó. ¿Ya los somalíes han encontrado un abastecimiento que les impide seguir muriéndose de hambre? Sería de ingenuos pensarlo, pero lo cierto es que ya no es noticia. Porque las noticias no pueden repetirse. Porque la repetición mata el interés. La realidad está ahí, pero los focos han cambiado de sitio. Y el "cuerno de África" sigue pasando hambre, pero está a oscuras.

Viene todo esto a cuento del problema que ha movilizado a buena parte del profesorado. Dos meses se cumplen desde aquella reunión en el Beatriz Galindo, el 31 de agosto, que viene a ser el punto de partida de las protestas de los docentes ante el (enésimo) ataque de la Consejería de la Comunidad de Madrid contra la escuela pública.

Dos meses en los que se han visto cosas inauditas: después de muchos años, un colectivo que acostumbra a mirar por sus intereses y practicar compartimentos-estanco (una cosa es el funcionario con plaza, otra el de expectativa, el interino ya ni te cuento...; los problemas que me afectan a mí -faltas de ortografía, el poco afán lector...-, al de matemáticas se la suda; el tutor se las ve y se las desea para conseguir información del resto de profesores de su grupo para llevarles información a los padres...) ha hecho un casi unánime movimiento reivindicativo en el que por fin se proclamaba el orgullo por ser docente, tomando un color, el verde, como símbolo de esta lucha. 

Después de muchos años, temas educativos volvían a las portadas de los telediarios, a las primeras planas de la prensa, a ocupar espacios amplios en la radio. Se consiguió desmentir las mentiras de nuestras dirigentes, que (recordemos, porque no sólo tendemos a pasar página, sino también a olvidar) nos vilipendiaron como pocas veces se ha visto. Dejó de hablarse de las 20 horas para incidir en la sistemática demolición de un sistema público, de un estado de bienestar, de igualdad y de inclusión que va dejando paso a un estado de privilegios, enchufismos en el que el que tiene dinero puede y el que no, que se fastidie. Hasta seis huelgas se han llevado a cabo con un número muy significativo (aunque decreciente) que las han seguido. Más de la mitad del profesorado han ejercido su derecho a huelga para detener las instrucciones de curso, para frenar esa política de favorecer descarada y abusivamente a la privada y la concertada. Ingeniosos encierros, manifestaciones masivas y marchas multitudinarias se han llevado a cabo y pese a las repercusiones, incluso internacionales, se nos ha ignorado. 

Porque esa es la táctica, hacer oídos sordos. Han aguantado el chaparrón, han asistido nerviosas a la presión que les hemos ejercido, han respondido con respuestas vagas, tramposas y equidistantes, han proclamado y defendido su modelo de conciertos (en Ventanas del Falcón se hace referencia al programa electoral) y se han escondido. Ni negociaciones, ni rectificaciones. Por más cercanía con el 20-N, están convencidas de ese modelo educativo donde la pública cumple el mero trámite de recoger lo que privados y concertados no aceptan. Saben que lo peor ha pasado y que la reiteración de nuestras protestas difícilmente encontrará eco en los medios de comunicación porque suena a repetido y a desgastado. Por ahí poco podemos esperar. 

Sin embargo, lo que no debemos es resquebrajarnos. En esa táctica de oídos sordos, cuentan con  aburrirnos y rendirnos (y lo están consiguiendo). Cuentan con que nos tiremos piedras unos a otros: que si yo he pedido tres días y el único día que me ofrecen los sindicatos vendidos no me vale para nada, que si CGT nos ampara esos tres días (un 20%, aproximadamente, según datos suyos, secundaron esa huelga fantasma, pero no se les pide responsabilidades y el núcleo duro se satisface con ese fracaso) y la Asociación de interinos ha proclamado la huelga indefinida; y, en el polo opuesto, los que se han descolgado, los que nos preguntan si creemos que vamos a conseguir algo, los que dicen que estamos perjudicando a nuestros alumnos con tanta huelga...

La solución se antoja complicada, pero nos asiste el derecho e incluso la obligación de defender la educación pública. Está claro que nos toca caminar con las luces apagadas y el foco apuntando a otras partes, pero cruzarnos de brazos o mirar hacia otro lado lo único que conllevará es que el curso que viene no sean 20 horas, sino 22 como en Castilla la Mancha, entre otras muchos recortes que se seguirán promoviendo. El panorama que nos espera es tenebroso (y no precisamente por la falta de focos): Educación prevé 1.190 docentes menos para 4.313 alumnos de instituto más, ¡ya está anunciado, luego no digan que no se lo esperaban! Señores, ajústensen los cinturones y adopten posturas poco edificantes con el trasero en pompa, que esto no ha hecho más que comenzar (les podríamos decir a aquellos compañeros que parece que esto no va con ellos).

La gran parte de la sociedad puede mirar hacia otra parte y negar la realidad de que sanidad y educación dejarán de ser gratuitas mientras se distraen con el Madrid y el Barça, con la Esteban y la baronesa al ritmo pendenciero de las cuadrillas del corazón; el sector privilegiado (CEOE, CEIM) puede seguir jaleando esas medidas represoras del derecho a la huelga (pincha aquí) y facilitando los despidos y la precariedad para que puedan seguir con sus stock-options y las millonarias indemnizaciones en los bancos (hay que leer el artículo de opinión de Javier Marías, ¿Qué me están comprando?) donde no nos concederán hipotecas o nos exigirán hasta el último céntimo, pero no negarán que les inyecten dinero de todos nosotros; los políticos seguirán con sus condiciones privilegiadas a cambio de llevarnos a la ruina, ofreciéndonos palabrería hueca y programas retóricos (en Un padre en la ESO se recopilan dichos programas); en cambio, nosotros debemos adoptar la voz crítica, advertir de los peligros que nos esperan y no resignarnos a retroceder 20 años en cuestiones sociales. Se trata de ahora o nunca.

Motivos no nos faltan: han expedientado (¡e incluso detenido!) compañeros, convivimos con horarios ilegales (modelos de recursos de alzada, aquí), dicen que somos vagos, privilegiados y que perjudicamos a nuestros alumnos (los mismos que, en su programa vuelven a recaer en lo de que "El elemento central para garantizar un sistema educativo de calidad es el profesorado, cuyo prestigio y autoridad se han visto socavados en el modelo actual", aunque no dicen que quienes socavan son precisamente miembros de su partido), segregan alumnos porque piensan que la excelencia tiene que ser extraída de la mediocridad, siguen favoreciendo a la privada trasvasando todos esos ahorros que practican con la pública... La rutina y el desgaste y los focos apagados serán nuestros acompañantes, pero al menos deberíamos guiarnos por esa luz verde.