Tras el parón por Semana Santa, la vuelta al tajo, tanto en el insti como aquí. Y dicha vuelta no ha resultado sencilla, nada de eso. Tu paz y tu sosiego se ven resquebrajados por asuntos como estos:
- Ya no puedes retrasar la limpieza del casillero. Has acumulado tantos exámenes, trabajos, fotocopias y quién sabe qué más que el armario amenaza con explotar. La tarea es titánica. Y un coñazo. Y te prometes no recoger nada que quede fuera de plazo. Ja...
- Recibes un montón de encargos para transmitir: que si pasar las hojas de las firmas (ver post anterior y atentos al siguiente) para que no cierren el nocturno, que si repartir el segundo número de la revista, que si llevar el último examen a los del viaje de fin de curso, que si los trabajos que has ido guardando y que has recuperado tras el punto 1.
- Subiendo por las escaleras con una montaña de cosas encima (ver puntos 1 y 2), te guardas la PDA en el bolsillo, pero a la muy escurridiza le da por deslizarse y escoñarse. Resultado: fragmentos de PDA esparcidos por la primera planta. Aunque crees recomponerla, va y falta la pieza más importante: la tarjeta de memoria (el cerebro de la maquinita, vaya).
- Te enteras de que me toca ir mañana con los primeros y cuartos al teatro (junto a otros tres compis) a una obra recomendada a partir de 2º de ESO. Salimos a las 10 y volvemos a las 13. Nadie te explica nada, eso sí, no vayas a saber cómo son las cosas.
- Llega la notificación de que mañana te toca asistir a una reunión informativa para el coñazo de las pruebas de nivel de 3º de la ESO. A las 12:30, en un instituto de la zona que no conoces. Tendrás que abandonar a tus compis y a tus alumnos a la vuelta (ver punto 4). Y el 21, tocará madrugar para personarte y rezar por que no falte el titular.
- Eso sí, a pesar de los pesares (ver puntos 1, 2, 3, 4 y 5), te encuentras, no sabes cómo, los primeros pares de llaves perdidos en la mesa de uno de los jefes de estudio. ¡Bien, ya tienes unas de repuesto!
- Ponen una hoja informativa en la puerta de profes para un amigo invisible conmemorativo del día del libro. Se regala un susodicho, algún detalle y pistas falsas. En teoría suena bien, pero lo que no me suenan son los nombres del 80% de los apuntados. Y es tu segundo año. Y te animan dos de las que conoces a que te apuntes y se lo digas a tus compis de departamento. Pero regalar un libro es algo que requiere de un cierto conocimiento, ¿no?
A lo mejor estas cosas me pasan por no haber hecho penitencia. Otro año, me apunto de costalero. O de picao, ya de paso. (2º Ja del post)
3 comentarios:
Después de tantas tareas, te queda plantar un árbol, subir en globo y...
No, no... después de tantas trabas, lo que tienes que hacer es grabar un corto y promocionarlo.
Dios, Juli... y luego dicen que los profes viven mejor que quieren... Donde esté la agenda de toda la vida, la que no se rompe al caerse, que se quiten las PDA´s.
Y yo que pensaba que te preguntaban si querías hacer tal o cual cosa... Ignorante de mí... Gracias por prevenirme (puedes escabullirte de las excursioncitas? Me dan miedo...)
Un abrazo, Inma.
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